Una vez que tus hijo/a termina la escuela secundaria, llega el momento de pensar en su futuro profesional. Aunque existe un amplio abanico de opciones de inserción laboral o formación profesional after school para aquellos que no quieren continuar con sus estudios, son muchos los adolescentes que se decantan por ingresar en una universidad y continuar con su formación académica y, no nos engañemos, no siempre resulta fácil saber qué carrera escoger. Así, aunque algunos saben desde bien pequeños “que querrán ser de mayor”, cuando llega el momento de elegir, la mayoría no tienen claro a qué se querrán dedicar en un futuro, algo que, por otro lado es muy normal, dada la juventud y la falta de experiencia. No obstante, la presión que pueden sentir por la obligación de “tener que escoger rápido” puede llevarles a padecer estrés o ansiedad por temor a equivocarse o a fracasar.
Como padre o madre que conoces bien a tu hijo/a, tu papel es fundamental a la hora de orientarles y ayudarles a reflexionar, sobre todo si no tienen una vocación definida o se debaten entre varios sectores profesionales. Eso sí, si bien es cierto que como padres tenemos mucha más experiencia y gozamos de un punto de vista más amplio, es importante no tomar la decisión por ellos, sino actuar como su guía, su apoyo, para que sean ellos mismos quienes decidan qué quieren hacer.
En este artículo compartimos contigo algunas recomendaciones que te pueden servir para poder acompañarle en esta decisión tan importante.
Mantén una mente abierta: vivimos en un mundo en constante cambio, que ha traído consigo nuevos perfiles laborales o trabajos que antes no existían, principalmente aquellos relacionados con el sector de las nuevas tecnologías. Es importante, por tanto, dejar de lado los prejuicios y mantener una mente abierta y receptiva a estos cambios, así como informarse acerca de cuales son estas nuevas profesiones del futuro, para poder estudiar con tu hijo/a los pros y contras de estos sectores emergentes; un tema que ya tratamos en un artículo anterior de nuestro blog y que te invitamos a recuperar.
Explora con él sus intereses: es interesante plantear a tu hijo/a algunas preguntas que puedan ayudarle a definir sus gustos y preferencias, lo que contribuirá a que puedan tomar una decisión de carrera más cercana a sus habilidades. Cuestiones tales como si le gustaría trabajar solo o formar parte de un equipo, si preferiría trabajar por cuenta propia o ajena, si le gustaría acudir cada día a una oficina o trabajar de manera remota, etc. Crear un espacio de confianza en el que fomentar su auto-conocimiento será de gran ayuda para considerar aquellas alternativas enfocadas en sus intereses y destrezas.
Una herramienta que también puede resultar de utilidad en este sentido son los test de orientación vocacional. Estas pruebas, ofrecidas por algunos expertos y universidades, son una excelente herramienta para conocerse mejor y proporcionar claridad sobre aquello a lo que a tu hijo/a le gustaría dedicarse en un futuro.
Distingue entre hobbies e intereses profesionales: El que tu hijo/a tenga un talento natural, como tocar el piano, jugar bien al tenis, ser bueno con los idiomas o dibujar, no quiere decir que aquello que se le da bien se tenga que convertir en su carrera. Pero si realmente ve este hobby como algo a lo que se querría dedicar en un futuro es una buena señal a la que hay que prestar atención y quizás potenciar.
Revisa y compara los planes de estudio de su interés: Conocer las materias teóricas y prácticas que se abordarán en el programa de aquellas carreras que llaman la atención de tu hijo/a le dará una idea clara de si la carrera en cuestión es adecuada para él, considerando sus intereses. Además, no debes pasar por alto la importancia de evaluar con él las asignaturas optativas, pues pueden proporcionar una perspectiva más amplia sobre cómo complementar su formación académica. Finalmente, presta atención a las salidas profesionales que se señalan en el plan de estudios, ya que su análisis os permitirá evaluar si coincide con la visión de su futuro, así como si son de su interés las habilidades, conocimientos y competencias que adquirirá una vez culminado el programa.
Infórmate de si hay clases de muestra o se convocan charlas de profesionales del sector. Algunas universidades ofrecen clases de muestra para que los estudiantes experimenten cómo sería su aprendizaje en el aula. Asistir a una de estas clases permitirá a tu hijo/a tener una experiencia de primera mano y hacerse una idea de la calidad educativa del profesorado y de las asignaturas impartidas. También podéis concertar una cita con el servicio de orientación de la facultad para obtener información adicional y plantear preguntas o dudas. Otra opción interesante es animar a tu hijo/a a contactar con profesionales del sector que le expliquen cuál es su día a día en su trabajo, los pros y los contras de la profesión, o qué hacen realmente, para tener una visión más real y menos idealizada sobre ella.
Considera el “triángulo de la carrera”. Según algunos expertos, al elegir una carrera, tu hijo/a debe considerar tres aspectos importantes,: satisfacción, estilo de vida y dinero. La satisfacción se refiere a lo feliz que será tu hijo/a con su carrera y la calidad con la que la desempeñará. El estilo de vida alude a cómo su carrera afectará a su vida diaria como, por ejemplo, el lugar de residencia, el horario o la flexibilidad. El dinero es la compensación financiera que obtendrá por su trabajo. Ayuda a tu hijo/a a reflexionar sobre estos aspectos y cómo se relacionan entre sí.
La tendencia al alza del año sabático. Son muchos los países que incluyen en el “programa vital” de los estudiantes lo que se conoce como año sabático o gap year, que es el año que se toma el estudiante antes de empezar los estudios universitarios. Un periodo en el que se aprovecha tanto para viajar a otros países como para hacer algún tipo de voluntariado. Aunque en España todavía no está muy arraigada esta costumbre y se contempla con cierto escepticismo, esta mentalidad está cambiando, y el tomarse un año sabático es una tendencia que va en aumento y que se valora como una posibilidad de crecimiento y autodescubrimiento; como una forma de salir de la zona de confort y enfrentarse a nuevos retos; como una oportunidad de conocer otras formas de pensar, culturas y hábitos o también para aprender o afianzar los conocimientos de un idioma. Si tu hijo/a no sabe qué quiere estudiar o aún no se siente preparado para tomar una decisión, quizás la opción del año sabático podría ser interesante, pues le aportará madurez, experiencia y autonomía.
Recuerda que también tiene derecho a equivocarse. Desde los primeros ciclos de estudios, los estudiantes pueden notar que tal vez su elección no fue la correcta. Sin embargo, en muchas ocasiones el miedo a decepcionar o a ser juzgados por sus padres puede hacer que sigan adelante en algo que no les brinda satisfacción y les produce frustración. Hazles saber que estás de su lado y que tienen un margen de tiempo para cambiar de elección, si así lo desean. Aunque pueda significar perder un ciclo de estudios, ¿no sería peor perder una vida entera en algo que no les hace felices?
En la Residencia Universitaria Sarrià estamos para ayudarte y orientarte en todo lo relacionado con la vida universitaria. Sabemos que la elección de qué estudiar y dónde alojarse es una decisión importante para ti y tu hijo/a. Es por ello que ofrecemos un entorno acogedor, seguro y de calidad, con un ambiente inmejorable que les permitirá sacar el máximo provecho a sus años universitarios. ¡No dudes en ponerte en contacto con nosotros! Estamos aquí para ayudarte en todo lo que necesites en esta etapa tan importante de la vida de tu hijo/a.
Fuentes:
http://www.magazinedigital.com/historias/reportajes/no-sabe-que-estudiar-ayudele-elegir
https://www.bbva.com/es/como-orientar-a-los-hijo/as-a-elegir-la-carrera-universitaria/
https://www.20minutos.es/noticia/4666588/0/como-ayudar-a-mi-hijo/a-elegir-carrera-universitaria/
https://merida.anahuac.mx/licenciaturas/blog/5-tips-ayudar-hijo-elegir-carrera

